ECLÉCTICO
Si eres de los que tiene mil ideas a la vez y no sabes cómo aplicarlas, este estilo es para ti. Ser ecléctico permite tener todas las posibilidades en un sólo lugar, siendo éste el perfecto escenario.
Al ser un estilo de mezclas, es importante hacer honor a su nombre, pero con un minucioso cuidado en cada movimiento. Lo ideal es que te dejes guiar por un experto para no terminar pareciendo museo desorganizado y con mala curaduría.
Tener una base solida es lo recomendable para que a partir de ella se coloque el resto de los elementos. Un espacio escandinavo, por ejemplo, nos permiten ir a lo más contemporáneo y aún así poder tener elementos rústicos, colores sólidos, superposición de texturas, iluminación cálida y fría, muebles de madera con toques industriales de metal, muros de ladrillo con arte conceptual como decoración. El estilo para los espíritus libres y creativos.